El portavoz del Grup Compromís, Joan Ribó, ha propuesto medidas de ahorro energético ante la situación de derroche de recursos en iluminación que ha llegado a un punto de no retorno “con el corte de fluido eléctrico que anteayer (14 de Febrero 2012) sufrieron instalaciones del Ayuntamiento de Valencia”.
Ribó ha explicado que desde que Barberá asumió la alcadía el número de farolas se ha duplicado hasta alcanzar las más de 92.000, con un coste de 160 millones de €. En 2010 cada valenciano consumió en iluminación pública 93’6 Kwh “una cifra que es el 52% más que en Madrid y un 63% más del consumo medio de Barcelona. “No tenemos duda que la política de iluminación en Valencia parece diseñada por el consejero delegado de una compañía suministradora de electricidad, más preocupado por los beneficios de sus acciones, que por el despilfarro de los dineros públicos”.
En este sentido, Compromís propone un cierre de las farolas que están sobreiluminando la ciudad. “Sin ir más lejos, Llíria acaba de reducir un 30% su iluminación exterior. Valencia debería apagar aproximadamente la mitad de sus farolas para tener una iluminación comparable a Madrid y para no ir engordando las deudas del ayuntamiento en este tema”.
El portavoz del Grup Municipal Compromís le recuerda a Rita Barberà y Alfonso Grau “que hay un Reglamento de eficiencia energética en instalaciones de Alumbrado exterior que hay que poner en marcha en nuestra ciudad. En este Real Decreto 1890/2008 se definen conceptos como deslumbramiento perturbador, luz intrusa o molesta o resplandor luminoso nocturno. Si se aplicara este decreto veríamos que nuestra ciudad no está bien iluminada sino sobreiluminada con todo el exceso de consumo que ello supone.